Hoy en nuestro blog presentamos una propuesta para decorar un interior: ¡paso a paso vamos a explicar cómo hacer una manta de lana peinada! Ya no tienes que mirar las fotos en Instagram o Pinterest con envidia: puedes preparar esta manta tú mismo y el coste será mucho más bajo que la compra de un producto listo.
Debido a su peso y delicadez, la manta de lana peinada tiene más bien una función estética que práctica. Desgraciadamente, puede deshilachar fácilmente y exige un tratamiento especial a la hora de lavarla. Entonces, ¿cómo usarla? Será perfecta como una cubierta de cama o sofá creando un clima muy acogedor.
¿Qué necesitamos para hacer la manta?
Solo la lana peinada. Es posible comprarla en varios colores, por tanto no habrá problema para combinar el matiz de la manta con tu diseño. Nosotros hemos hecho una manta de 2 kg de lana: sus dimensiones son alrededor de 80 x 90 cm, ¡así que compra una cantidad adecuada para conseguir un efecto satisfactorio!
Manta de lana peinada paso a paso
La primera parte es la más difícil, el resto ya no llevará tanto tiempo. En las fotos hemos apuntado exactamente dónde están los extremos de la lana para que sea más fácil comprender las instrucciones.
1. Desenrolla la lana y crea un "pieza" doble: esta será la anchura de tu manta. Toma en cuenta que para obtener 80 cm de tejido, hemos usado un pedazo de 2 m.
2. La segunda etapa consiste en hacer el primer nudo. Con este objetivo, crea un bucle flojo pasando el extremo corto por el largo (el que está conectado con la bobina). Después, pasa el extremo largo por dentro del bucle y tira del extremo más corto para apretar el nudo. ¡Has completado el primer paso!
3. La etapa siguiente es tejer la primera fila de la manta. Haz un bucle con el extremo más corto de la lana (mira la foto: el extremo va por encima y no por debajo). Luego, pasa el extremo más largo por el centro del bucle: se formará un nuevo bucle. Sujeta el nuevo bucle con el que está al lado y tira del extremo más corto de la lana para hacer un nudo, sin apretar demasiado. Sigue repitiendo esta puntada hasta que notes que del extremo más corto de la lana ya no se puede hacer otro bucle. ¡Lo más difícil ya está hecho!
Ahora pasamos para la parte central de la manta: el método se parece a hacer punto. Para tejer apenas usarás los bucles ya formados y un extremo de la lana.
4. Amplía el bucle y por debajo pasa el extremo de la lana: de esta manera se formará un nuevo bucle. De este mismo modo sigue entrecruzando el extremo de la lana en los bucles en el mismo nivel: primero de izquierda a derecha y después de acabar la fila, al revés.
Cuando juzgas que la manta es lo suficientemente grande o comienza a faltar el material, es un señal que debes terminar.
5. Pasa el primer bucle de la fila por el que está al lado, gracias a que obtendrás un nuevo bucle. Pasa por él el extremo restante de la lana. Repite alternadamente estos dos movimientos hasta llegar al final de la fila; después simplemente ata un nudo.
